La utilización política de ASAJA

El día 20 de febrero, el diario El Mundo publicaba una entrevista con Tomás Cortés, que fue temporalmente Conseller de Agricultura en el segundo gobierno de J. Matas y por dos veces, presidente de ASAJA (Asociación de jóvenes agricultores). No lo conozco personalmente, pero más allá de la distancia política que seguramente nos separa, me resultó muy interesante la entrevista por los comentarios que hace sobre la agricultura balear, tanto en su literalidad y lo que trasluce entre líneas, como por su opinión sobre la actual ASAJA.

 

Efectivamente, el suelo rústico y probablemente muchos otros sectores, necesitan simplificar la normativa y clarificarla. Pero sobre todo, es preciso que se cumpla. La solución no es una ley agraria que desregula las construcciones en suelo rústico y con el eufemismo de “actividades complementarias”, permite campos de polo sin interés general, sin justificar disponibilidad de agua, etc.; no obstante, se puede estar de acuerdo en que no hay problema en que haya “un par de campos de polo” que, en cualquier caso, no van a ser promovidos por los agricultores sino por terratenientes o empresarios (y conviene diferenciar). Y menos mal que finalmente, se eliminó como actividad complementaria “los masajes no terapéuticos”…

 

Ciertamente, la agricultura de las islas y no solo ella, sufre el problema de la insularidad por los costes añadidos, que muchas veces se incrementan de forma injustificada. Por ejemplo, recuerdo que hace 25 años, un cuchillo de supervivencia con un peso de unos 700 gr, en Madrid valía 5.000 pesetas y en Palma, 12.700 pts. Diferencia difícilmente justificable con la excusa del transporte. Esto es un problema que se resuelve con medidas legales y de control, contra lo que podría considerarse una estafa y con capacidad de negociación y presión política.

 

Hay que ser prudentes al pedir las mismas condiciones que para el resto del país y matizar a que aspectos nos referimos (sobrecostes, etc.) y no generalizar. Porque, por ejemplo, los recursos hídricos y el clima no son los mismos y no se puede gestionar el agua de la misma manera.

 

Es una gran verdad que “necesitamos ser más previsores y tener las canalizaciones, las depuradoras y las desaladoras en condiciones. Invertir en recursos hídricos es probablemente más importante que invertir en palacios de congresos o en un Palma Arena”. Absolutamente cierto. Convendría recordárselo a Bielén Company, que en cuatro años ha abandonado en la práctica, el mantenimiento de las depuradoras y desaladoras, no ha puesto en marcha la desaladora de Ciudadela ni la de Santa Eulalia y ha ignorado la evolución de los indicadores de sequía de los que disponía la Dirección General de Recursos Hídricos, elaborados por sus técnicos. Y todavía tiene la desfachatez de acusar al actual Conseller de Medio Ambiente, de falta de previsión.

 

Tomás Cortés apunta también otros problemas como los monopolios en el sector lácteo o la necesidad de importar piensos de la península. Por cierto, que lo de los piensos y su importación era, al menos hasta hace poco por lo que tengo entendido, prácticamente un monopolio. También de sus declaraciones, se trasluce una falta de gestión de los aspectos agrarios a lo largo de muchos años, tanto en los temas de comercialización como de implicación social y posiblemente, de adaptación a la realidad insular. Hace tiempo ya, que surgen algunas voces conscientes ligadas al campo, que se plantean si es lógico regar alfalfa para dar de comer a las vacas para producir leche, en un clima como el nuestro y con los problemas de recursos hídricos existentes, máxime cuando se reconoce que es difícil competir con la que llega de fuera. O regar patatas, en general solo aptas para que se las coman los ingleses y poco más (esto es broma y está dedicado a mi amigo Jaume Font), aunque el consumo de agua para este uso ha disminuido, tanto por la mejora de los sistemas de riego como por la utilización de variedades más adaptadas a la climatología.

 

La problemática es pues muy compleja y en lugar de abordarla como tal, actuando conjuntamente todos los actores sectoriales y políticos, las batallas se centran siempre en el tema subvenciones: ayudas, exenciones, PAC (Política Agraria Común), etc. Si llueve, porque se pudren las cosechas. Si hiela o graniza, porque se pierden. Si hay sequía, porque se pierden los pastos o no nacen… Parece que se olvida la existencia del seguro agrario y si este es inasequible para los agricultores, las asociaciones deben pelear para que sea asumible.

 

En realidad, el problema es que los planteamientos racionales no interesan a ASAJA, porque como muy bien dice Tomás Cortés, “se ha convertido en la plataforma política de un ex conseller”. No es nueva esta utilización, pues cuando Bielén Company fue presidente de ASAJA, la utilizó como plataforma para ser Conseller de Agricultura, ofreciendo a J.R. Bauzá, paz y votos en la part forana.

 

Conviene reproducir algunas declaraciones del Sr. Cortés por la claridad con que define en que se ha convertido ASAJA y sobre todo, por venir de una persona profundamente conocedora del tema:

 

En ASAJA ha desembarcado mucha gente de la anterior conselleria y la anterior administración, gente que perdió las elecciones y que se ha metido allí. En la junta directiva hay asesores de la anterior conselleria; el gerente era antes gerente de una empresa pública y el presidente, es hermano del anterior Conseller de Agricultura”.

No me gusta que haya un diputado que ha sido presidente de ASAJA y Conseller y que ahora se enfrasca en batallas políticas”.

No quiero una tractorada que esté politizada o para escalar posiciones en el PP”.

Finalmente, es muy acertado el símil marinero de Tomás Cortés, acorde con su profesión, comparando al PP con un barco a la deriva, barco del que dice que “hay gente que quiere llevar el timón sin haber creado estructuras políticas”.

 

 

Que no se engañe el Sr. Cortés: a Bielén Company le importan un ardite ASAJA y sus asociados, el PP y sus afiliados, más allá de utilizarlos como instrumento para servir a sus intereses personales.

Alfredo Barón, Cabrera, marzo 2013
Alfredo Barón, Sierra de Cameros, La Rioja, 1967
"Yo siempre escribo a lápiz, las palabras en los ordenadores se las lleva un click" EL ROTO

 

 

 

 

Ésta página web es un regalo de jubilación para Alfredo Barón, de sus amigos.

Abril 2013.

 

 

 

 

 

Imagen portada: "Els Encantats, Pirineus."